Miércoles, 25 de julio de 2012, uno de los mejores días de mi vida. ¿Por qué? Porque oficialmente, ya pertenezco al club de mi vida y que llevo tatuado en mi piel y en mi corazón. Sí, ya soy socia abonada del Atlético de Madrid, y me muero de ganas porque empiece la liga y veros a todos en el estadio dándolo todo por nuestro equipo, con el objetivo de conseguir algo grande este año y sobre todo de disfrutar muchísimo.
Inmensas ganas de apoyar y ver a Courtois, Falcao, Arda Turan, Juanfran, Adrián, esperemos que Oliver Torres y al resto del equipo todos los domingos en nuestro templo, en el estadio que nos da la vida, que nos llena de ilusión, en el que lloramos, en el que reímos, en el que sufrimos muchísimo pero en el que disfrutamos como si nos fuera la vida en ello.
De momento falta mi pilar fundamental, mi dios en el campo, la calidad, la elegancia, una cabeza en el equipo, el gran Diego Ribas, nada está sentenciado, eso es así, pero está claro que todo apunta a que el mediocentro brasileño no militará en las filas del Atlético de Madrid la próxima temporada. Hubiera dado lo que fuera por verle jugar en el Calderón, por haberle disfrutado cada domingo, pero aun así, seguiré llevando su camiseta orgullosa de haber visto jugar a uno de los jugadores que más me han marcado en la historia del Atlético de Madrid.
Pero ahí sigue estando mi equipo, con o sin Diego Ribas, con el más grande al frente, Cholo Simeone y una plantilla con Arda Turan al mando, digna de Champions y Liga. Ese es, Arda Turan, el que promete llevar las riendas del equipo, centrocampista que emana calidad allá donde vaya, y que nos va ha hacer disrutar mucho del fútbol la temporada 2012-2013 en el estadio...
VICENTE CALDERÓN.
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